Ya sé que os tengo un poco abandonadas, pero ha habido cambios en casa, mi marido ha cambiado de horario laboral y esta semana ha sido especialmente complicada y cansada para mí. He tenido que hacer muchas cosas, ir a muchos sitios, planear los eventos de los próximos días,...,y me he encontrado bastante sola debido a nuestros horarios estos últimos días.
También tengo que cumplir mis objetivos este fin de semana para seguir con mi calendario particular, pero al menos Paco está en casa, y aunque a veces me da más qué hacer que otra cosa, se agradece la compañía.
Pero bueno, por suerte no es así cada semana, y las que vienen aunque no están faltas de trabajo, si me apuráis, tendré aún más, pues también estarán llenas de buenos y estupendos momentos. Ya lo podréis ir viendo, y espero que os gusten las cosas que os vaya presentando, unas ya están terminadas, otras en marcha, y otras por hacer, pero digo yo que pasito a pasito iremos llegando a todo.
Ayer viernes, aparte de comenzar con uno de estos proyectos me apetecía hacer este pastel. Ya sabéis que el café es una de mis debilidades y que en cuanto encuentro ocasión, hago alguna receta que lo contenga. Ésta en concreto, ha sido fruto de reunir muchas buenas ideas que he ido encontrando por ahí, de libros, de webs y de blogs.
Así, que después de darle algunas vueltas se me ocurrió hacerla tal y como la veis. Cuando hoy por fin la han probado en casa, que llevaban desde ayer echando vistazos a la nevera y deseando en silencio que pasara de hacerle fotos y me decidiera a decirles que la empezaran, ha triunfado, y es que este pie tan esponjoso, suave y refrescante es ideal para estas fechas calurosas que se avecinan.
A veces la verdad es que me da pena, porque los pobres están como locos por meterle mano a mi última ocurrencia, y los tengo que mantener a raya para que llegue viva para la sesión de fotos. Si se trata de pastelitos individuales siempre hay alguno que sale más feote y les doy permiso, pero en casos como el de hoy no queda más remedio que esperar, y basta que te digan que no puedes hacer algo para que te entren más ganas, pero eso es lo que tiene que tu madre o tu esposa esté como una cabra y decida compartir todo lo que hace con el mundo.
Y eso no es nada, teníais que ver cómo tengo hoy la mesa del salón, llena de galletas, y yo ahí dale que te dale, decorando y decorando. Tienen una paciencia conmigo que yo diría que es sobrehumana, pobres míos.
Menos mal que después quedan encantados con mis disparates, que si no, entonces no merecería la pena, la verdad. Porque por muy loca que yo pueda estar, sino fuera por ellos, nada de esto tendría sentido. A ver si no, para quién hacía yo 54 galletas de Comunión, o 34 de cumpleaños, o una tarta de piratas,..., o lo que sea que quieran pedirme.
Pues vamos ya de verdad con la receta de hoy, por muy complicada que os pueda parecer porque tiene varios pasos, no lo es en absoluto. Cada paso es sencillo, quizás lo alargue un poco los tiempos de enfriado, pero os aseguro que en una mañanita la podéis tener más que lista, y los que la prueben os lo van a agradecer.
Ingredientes:
Para la corteza:
* 3 claras de huevo.
* 1/4 cucharadita de cremor tártaro.
* 1/8 cucharadita de sal.
* 3/4 taza de azúcar.
Para el relleno:
* 420 gr. de leche condensada.
* 1/2 taza de café.
* 240 gr. de nata para montar, montada.
* 3 cucharadas de caco.
* Un sobre de gelatina en polvo, sin sabor.
Para el topping:
* 200 gr. de nata para montar, montada.
* 150 gr. de crema de malvaviscos (fllufy marshmallow).
* Canela en polvo para decorar.
* Chips de chocolate, aunque yo a última hora me decidí por peta-zetas de chocolate.
Preparación:
La corteza:
- Colocar las claras en un bol unos 30 minutos, para que se queden a Tª ambiente.
- Agregamos el cremor tártaro y la sal a las claras de huevo, batimos a velocidad media hasta que formen picos suaves.
- Incorporamos poco a poco el azúcar, una cucharada cada vez, sindejar de batir. hasta que formen picos rígidos y brillante y el azúcar se haya disuelto.
- Repartimos en el fondo y los lados de un molde bien engrasado.
- Horneamos a 180ºC durante unos 25-30 minutos, hasta que el merengue se dore.
- Desmoldar y dejar enfriar sobre una rejilla.
Relleno:
- En el café caliente diluiremos la gelatina, y esta mezcla se la agregaremos a la leche condensada, batimos hasta que todos los ingredientes queden bien ligados.
- Dejamos reposar unos minutos para que se atempere, y revolvemos con la nata montada, de poco a poco y con movimientos envolventes hasta que quede todo bien integrado.
- Colocamos la mezcla sobre la corteza y dejamos enfriar en el frigorífico hasta que esté firme.
Topping:
- Mezclamos la nata montada y la crema de nubes en el vaso de la batidora.
- Repartimos sobre la parte superior y espolvoreamos con la canela y los chips de chocolate.
Sabéis que ya he preparado unas cuantas recetas, y cuando he probado este pie esta mañana me he quedado traspuesta. Suave suave, esponjoso esponjoso. Se derrite en la boca mientras te da la oportunidad de saborearlo. Si es que hasta la corteza se deshace en el paladar.
Ya no os digo más, preparadlo, porque además estoy segura de que repetiréis. Besotes y buen finde.
Hay por dios!! que pinta tiene!!!
ResponderEliminarEsta buenisima!! Bravo!! me encanto!!
Tiene una pinta estupenda. Seguro que les encanto. Besos
ResponderEliminarComo siempre, me habeis enamorado de vuestra receta!! Que maravilla, deliciosa!!!
ResponderEliminarQUE BUENA PINTA UMMM.BESOS
ResponderEliminarMerece la pena esperar un mes entero para probarlo..... me encanta! Besos
ResponderEliminarQué perfecta en todos los sentidos, no me extraña que sea cuchara de oro, jeje. Besos
ResponderEliminarVaya tarta más tentadora!!! deliciosa! bss
ResponderEliminarMe parece muy rica ,y aunque lleva un rato prepararla el resultado merece la pena.besinos
ResponderEliminarque buenisima pinta!
ResponderEliminarQué aspecto tan bueno¡ tiene que estar buenísima¡¡¡
ResponderEliminarMe encantan las fotos¡
Saludos :-)
qué pintaza tiene, eso tiene que saber a gloria! Una pregunta, hace tiempo pregunté por el cremor tártaro en la farmacia que era donde se compraba antiguamente, y me miraron con cara de "esta loca..." Donde lo compras tú? Y ya puestos, dónde la crema de marshmallow? Gracias!
ResponderEliminarchurruca4, yo los suelo comprar en La casita dulce de las flores. Ya hay muchas tiendas especializadas como ésta, en repostería, si no hay ninguna en tu ciudad puedes acceder a ellos on line fácilmente. Un besote.
EliminarFantástica a la vista y al gusto si si se que no la he probado pero por la pinta tiene que ser una delicia para el paladar besos
ResponderEliminarummmmm si dice cómeme¡¡¡¡me llevo una porción
ResponderEliminarTomatelo con calma,,,todo sale!!!!la tarta riquísima!!!!!!Yo acabo de publicar unos carquiñolis de chocolate avellanas y café!!!!un besito!!!
ResponderEliminarohhhhh ¡¡¡y yo en plena operación bikini ¡¡ qué pintaaaa ¡¡¡
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