martes, 18 de octubre de 2011

Coffe-Oreo Dessert.

  El Domingo me encontraba con ganas de hacer algo muy sencillo y apetecible, ¿por qué?, pues por lo de siempre, porque me despeja y dejo de darle vueltas a las cosas.
















  Y es que a veces, aunque una se proponga no pensar en algo no para de venir a la cabeza una y otra vez. Así que decidí meterme en la cocina y concentrarme en otras cosas, porque además hay causas que no tienen  solución por más vueltas que se le den, y lo único que se consigue es un tremendo dolor de cabeza.
















  Hay tantas cosas que me indignan cada día, que de verdad, a veces se me hace difícil seguir hacia adelante. No entiendo por ejemplo, en el hospi, que pueda haber enfermos y familiares tan desagradecidos y maleducados. Tampoco entiendo que la gente deje un coche en un mal lugar y cuando tú estás haciendo casi magia para poder pasar, encima te miren con desprecio como diciendo: " Como me rocessss..."

  Me cuesta digerir que alguien diga de otra persona que no la puede ni ver, y cuando entra por la puerta le monte una fiesta y le dé dos besos. No comprendo que sabiendo quién tiene la culpa de algo, se escuche cómo se responsabiliza a otro y se quede callado.

  Me es difícil aceptar que las personas no tomen partido, y prefieran mantenerse a una distancia prudente para que no les salpique. Me pone de los nervios que se justifique lo injustificable.
















  Sí, ya lo sé, hoy ando un poco mística, pero es lo que toca hoy...jejeje. No es que yo me considere muy buena persona, ni muy generosa, ni nada de eso, más bien me gusta presumir de ser un poco "bicho", ¿por qué?, porque quienes presumen de ser sumamente buenos suelen resultar tremendamente aburridos. A mí cuando sólo se puede decir de alguien que es "muy buena gente" sin más, me suele oler a chamusquina, ¿no tiene más cualidades?, ¿es que no se puede decir que es trabajador, honrado, considerado con los demás, un padrazo,...? ¿no hay más qué decir? ¿sólo "buena gente"?.



















  Y yo digo cómo diría mi suegro ¿eso qué "entitula"?, ¿qué se quiere decir cuando es lo único que se puede decir de alguien?.

  Hay otra frase que me molesta mucho mucho mucho, la de la "envidia sana", si es envidia jamás puede ser sana, la envidia de por si es cochina. Cuando a un amigo mío le pasa algo bueno, me alegro por él, si me da envidia, mal asunto, porque aunque le quiera poner un disfraz, no deja ser envidia.
















  Bueno, creo que ya me he extendido bastante por hoy con mi rollo metafísico, que estos días me reconcome un poco con las cosas que veo que pasan a mi alrededor.

  Vamos con la receta, necesitamos:

* 16 galletas tipo oreo para el fondo del postre, algunas más para la crema (eso al gusto), y unas cuantas para decorar al final.
* 50 grs. de mantequilla.
* 20 malvaviscos.
* Unas gotas de agua.
* Unos 400 cc. de nata para montar.
* Un par de cucharadas de café soluble.

  La preparación resulta muy fácil:

- En una procesador de alimentos triturar las galletas junto con la mantequilla. Con esa pasta cubrimos el fondo de los recipientes elegidos para nuestro postre y dejamos enfriar en el frigorífico un par de horas.

- Calentaremos al baño María o en el microondas, o en la thermomix (eso dependiendo de lo que tengáis la posibilidad de usar), nuestras nubes junto con unas gotas de agua y el café soluble.

- Una vez hecho esto, reservaremos esperando a que se enfríe por completo.

- Cuando esté frío montaremos nuestra nata, con un procesador de alimentos batiremos la mezcla anterior y se la incorporaremos a la nata con sumo cuidado, mejor a mano.

- Partimos varias galletas que repartiremos por la mezcla cremosa y la dispondremos en nuestros recipientes sobre la base de galleta anterior.

- Yo por encima decidí poner un poco de polvitos de Cola-Cao, mejor que cacao puro, por los peques y una galleta para decorar.

- Y al frigo hasta la hora de servir.

  A mis niños (incluyendo al grande, mi marido) les ha encantado este postre, espero que os decidáis a probarlo y perdonad por el rollo místico, pero como ya sabéis, cuando me siento a escribir, me dejo llevar. Besotes para todos.
















  Ahhh!!! y no quiero dejar de dar las gracias a Trinidad de  Dulces Alegrías por el último premio que ha concedido a este blog, es una gozada recibir estos reconocimientos, y como yo lo tengo que dedicar a otros diez blogs, pues teniendo en cuenta que en nada me toca ser la anfitriona del Concursorteo "¡Mami...Papi...yo también!", pues se lo doy a mis diez compañeras de fatigas, ahora estoy entendiendo lo difícil que resulta escoger una receta para que la hagan los peques en casa. Ya tengo algo en mente, así que en un par de semanas aquí me tendréis dando el callo. Un besazo enorme para ellas y este premio.




10 comentarios:

  1. Tienes razón con eso de que hay cosas que por muchas vueltas que les des lo único que ganas es un buen dolor de cabeza. Pero... a que eso de decirlo, escribirlo... te alivia un montón? Como que vacías....

    Lo de las oreos, qué bueno!

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  2. Yo tambien utilizo la cocina como balsamo para el alma, por mi profesión también me paso el día con gente y sus circunstacias a veces es dificil no llevarse sus problemas a casa. Por cierto a que le llamas malvaviscos,? Como puedo encontrarlos?

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  3. María, los malvaviscos son las nubes de chuches, a mí personalmente, para este tipo de cosas me gusta usar las tipo americanas, esas que salen en las pelis los niños en las acampadas poniéndolas al fuego. Ya las puedes encontrar sin dificultades en Carrefour por ejemplo.

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  4. Digamos que todos tenemos días en los que el alma nos tiene pendientes de un hilo.... si la cocina te evade en esos momentos, aprovecha, disfruta y haznos disfrutar con las cosas que haces! Con tu permiso te copio la receta, mis hijos son unos enamorados de las oreo! Un beso

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  5. Yolanda te ha quedado un postre super apetecible y precioso!
    Besos

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  6. Para ser tan sencillo se ve delicioso!!!

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  7. Hola,
    En Lindt España nos ha gustado mucho tu blog y deseamos ponernos en contacto contigo con el objeto de hacerte llegar un envío con una selección de nuestros mejores chocolates y un poco de información. ¿Serías tan amable de enviarnos tu nombre completo, dirección postal y un teléfono de contacto? Nuestra dirección de correo es Socialmedia-SP@lindt.com

    Cordialmente,
    Lindt Chocolate España

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  8. Yo también me indigno con todas esas cosas. No entiendo tantas cosas que pasan a mi alrededor. Si la gente comprendiera que todo es una cadena y que con pequeñas acciones o gestos podemos cambiar un poquito las cosas...No cuesta nada una sonrisa y hace tanto bien. O una buena palabra... Así que como ya he comprendido que yo no puedo cambiar sola el mundo, pues haciendo esos pequeños gestos sí que ayudo, y con eso me conformo (eso sí, si tengo mal día...se me olvida todo esto, jajajaja).
    Respecto a lo de la envidia sana...es un término que utilizo mucho, pero también a veces pienso en lo que dices, que la envidia es un término feo en sí. Pero creo que quien utiliza ese término lo utiliza así por ejemplo cuando alguien se compra un coche que me gusta y digo "qué envidia sana me das", quiero decir (y con el corazón en la mano) "cuánto me alegra que te hayas comprado el coche! que lo disfrutes".
    Pero a lo mejor es verdad que la expresión tiene el significado que yo le otorgo...tendré que cambiar la expresión y expresar el sentimiento.
    ¿Qué? yo no me quedo atrás en reflexiones metafísicas, jajajajajajaa!!!
    El postre tiene una pinta estupenda! no me extraña que encantara!

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  9. Mª José te entiendo tan bien, comprendo lo que dices de la expresión, yo realmente creo que la mayoría de las personas lo utilizan de buena fe, incluso cuando se habla de envidia cochina muchas veces también se dice dando a entender todo lo contrario, como mi Choni cuando me dice por el Fb : "qué envidia cochina te tengo", sé perfectamente que lo hace como un halago y no me ofendo en absoluto, porque sé que está dicho desde el cariño y además con mucha gracia. Lo que digo es como tú, que la expresión "envidia sana" en si es fea, y depende de cómo se diga, como todo en la vida.

    Gracias a todas, sois unos soletes, no siempre tengo tiempo de contestaros, pero me encanta leer vuestros comentarios, me hacen ponerme las pilas para marcarme nuevas metas.

    Y gracias a los señores de Lindt,me ha hecho mucha ilusión, en cuanto pueda les envío el correo, claro que sí.

    Besotes para tod@s, sólo sé pagaros de una forma, con nuevas recetas, así que mañana nueva publicación.

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  10. Que pedazo de postre más requeterico!!me lo apunto!!!!!

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