viernes, 3 de febrero de 2012

Fresh Apple Cake

  Pues ya estoy aquí con nueva receta para el finde. Ya os dije que se iban unas compañeras y venían otras, así que como hoy toca trabajar de noche pensé que estaría bien preparar algo a modo de bienvenida al grupo, y digo al grupo y no a la plantilla, porque una de mis nuevas compis de cuadrilla es alguien de la plantilla que ha decidido cambiarse de equipo.


  A veces resulta complicado esto de trabajar tantas horas con las mismas personas, porque además de conllevar muchas horas de convivencia juntas, nuestro trabajo requiere una buena dosis de confianza en tu compañera, sobre todo en los momentos complicados. Cuando la vida de alguien depende de nosotras es importante que cada uno esté en su lugar y que sepa qué hay que hacer, y si eres capaz de hacerte comprender con una mirada o viceversa, entonces la compenetración es perfecta y todo irá mucho mejor.
















  En ocasiones una no puede, no existe esa conexión, o tus compañeros no terminan de convencerte, o simplemente tenéis formas de trabajar muy diferentes.Y realmente debo confesar que este cambio ha sido como un soplo de aire fresco, no me importa reconocerlo a pesar de lo que puedan pensar los demás, y es que andaba un poco quemada con alguna "compañera".
















  No sé si esta permuta será buena a largo plazo, quién puede saber cuál será nuestro futuro, pero de momento me siento contenta e ilusionada, y por desgracia hacía ya algún tiempo que dependiendo con quién estuviera se me hacían bastante duras las horas en el hospi, y lo cierto es que tener que ir así a trabajar se hace cuesta arriba.



  Y bastante tiene ya una con las cosas que debe aguantar allí a diario para encima no sentirte a gusto, y es que de verdad que encima algunos de nuestros enfermos "tienen un mandao", y los familiares a veces son hasta peores.





















  No sé qué pensaréis al respecto, pero por si acaso, voy a aclarar ya algunos puntos: Las enfermeras damos un servicio, no somos la chacha de nadie, ni nos interesa saber cómo funcionan la tele o el teléfono de la habitación que lleva una empresa que se lo lleva calentito. A veces surgen urgencias y la medicación hay que darla a las 16:15h., y no pasa nada si no se administra a las 16:00h. en punto. La pastilla de dormir sabemos que hay que dársela al enfermo, no es necesario que vengan 4 familiares a pedirla. Si se ha llamado al timbre basta con hacerlo una vez, si no acudimos inmediatamente es porque estamos ocupados, y si todo el mundo hace lo mismo nos es imposible adivinar cuándo alguien necesita que acudamos urgentemente, vamos, que si es para la dichosa pastillita para dormir, puede esperar, sobre todo si son las diez de la noche. Cuando estamos desayunando, almorzando o cenando, no nos resulta agradable que la gente asome la cabeza como si se le fuera a descolgar desde el mostrador para ver lo que estamos comiendo. Las enfermeras debemos ser correctas y educadas, pero de veras que no hace falta que seamos la alegría de la huerta, tenemos derecho cada una a ser como somos. Cuando entramos con una batea o nuestro carro y pedimos que las visitas salgan fuera, nos molesta profundamente que las personas del pueblo o los vecinos aprovechen para poder irse, y nos toque esperar de brazos cruzados diez minutos mientras se despiden cuando tenemos aún muchas tareas pendientes. Y por favor, por favor, por favor, ni se os ocurra decir de forma reivindicativa: "Para eso lo pago", a mí ninguno de los pacientes del servicio me ingresa el dinero en mi cuenta corriente, y si nos ponemos así, pues la mayoría de nuestros clientes, los pensionistas, no cobrarían sus pensiones si personas como nosotras no cotizáramos religiosamente cada mes a la Seguridad Social. Y voy a dejarlo aquí porque si no, no terminaría nunca.


  Aclaradas ya todas estas cuestiones, vamos con la receta de hoy, está sacada del libro: "All cakes considered", a mí sinceramente me maravilló su portada nada más verlo con esa foto tan bonita y delicada, y el interior tampoco decepciona con sus magníficas recetas. Me llamó la atención ésta receta con manzanas, y es que mira que quedan bien las manzanas en cualquier pastel. No so dejéis llevar por su  aspecto, esta vez no ha quedado tan perfecto porque al verter el glaseado, que bueno, es más como una salsa, se desmoronó un poco. Si repito, este bizcocho lo haré en otro tipo de molde, pero fue error mío no hacer caso a los consejos de la autora. Aún así, la mezcla de sabores es fabulosa.
















  Ingredientes:

  Para el bizcocho:

* 3 tazas de harina para todo uso.
* Una cucharadita de bicarbonato sódico.
* 1/4 cucharadita de sal.
* Una cucharada de canela en polvo.
* 3 tazas de azúcar.
* 3 huevos grandes.
* 1 1/2 taza de aceite vegetal (yo lo usé de girasol).
* 1/4 taza de zumo de naranja (yo lo puse de limón, me quedé sin naranjas).
* Una cucharada de extracto de vainilla.
* 3 tazas de manzanas peladas y cortadas en cubitos.
* Una taza de coco rallado.
* Una taza de nueces pacanas cortadas (yo usé de las nuestras porque ya contaba con las justas para la magdalena de la semana, y no tenía pensado ir a comprar de inmediato).

  Para el glaseado:

* 1/2 taza de mantequilla sin sal.
* Una taza de azúcar.
* 1/2 taza de suero de mantequilla o buttermilk.
* 1/2 cucharadita de bicarbonato sódico.
















  Preparación:

  Bizcocho:

- Pre-calentamos el horno a 170ºC y preparamos el molde.

- En un bol mezclamos los ingredientes secos tamizados: la harina, el bicarbonato sódico, la sal y la canela.

- En el bol de la batidora verteremos ahora el azúcar, los huevos, el aceite, la mezcla de ingredientes secos, el zumo de naranja y la vainilla, todos juntos y batiremos hasta que estén todos bien mezclados.

- Añadimos las manzanas, las nueces y el coco y mezclamos, a mano con una paleta o una lengua.

- Vertemos en el molde y al horno durante hora y media, o hasta que comprobemos que está bien hecho.

- En teoría había que hacer el glaseado y echarlo antes de que estuviera hecho del todo en el horno, pero como yo usé este molde preferí hacerlo después, una vez desmoldado.

  Glaseado:

- Derretimos la mantequilla en un cazo mediano a fuego medio.

- Agregamos el azúcar, la buttermilk y el bicarbonato sódico.

- Llevamos la mezcla a hervir sin dejar de remover durante un minuto y retiramos del fuego.

- En este punto yo lo he vertido sobre el pastel, aún calientes ambos.
















  No os podéis imaginar la cara de mi hijo mayor cuando lo probó, hasta dramatizó haciendo que se desmayaba de lo rico que estaba y bien pronto dijo: "Mami, mañana me guardas un poquito para la merienda, vale???". Así que quedará repartido, una parte irá esta noche al nuestro office del hospi, y otra se quedará en casa para la merienda de los chiquis.

15 comentarios:

  1. me encanta esta receta, y las fotos son preciosas.
    jajaja, lo de las enfermeras esperando mientras la gente se despide es como la vida misma, jaja. besos guapa y feliz finde!

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  2. Pues yo lo veo precioso, que te sea leve el nuevo turno y que los compañeros te lo hagan aún mas.
    Un beso.

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  3. Está genial. De esta tarde no pasa que prepare algo con manzanas.

    Besis

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  4. Un pastel delicioso :) espero que encajéis todos muy bien. Con la cantidad de personas distintas que hay es difícil complementarse siempre.

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  5. Madre mía!! yo era una de esas pesadas que llamaba al timbre para pedir la medicación para Alonso si no me la traían a la hora, pero enseguida me di cuenta que no pasa nada.. pero somo unos desconsiderados yo después pasar tanto tiempo en el hospital con el niño ingresado me doy cuenta de todo lo que dices y de más. Me ponen enferme aquellos padres que dicen saber mas que vosotras o incluso el médico. Yo sabré mucho de como cuidar a mi hijo pero por respeto a vosotras os dejo hacer a vuestra manera que a lo mejor no es igual que la mía pero el fin es el mismo :).
    y de la receta ya no te cuento las ganas que tengo de hacer un bunt... cual me recomiendas de todos los que tienes? Besines

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    Respuestas
    1. Chiqui, al principio es normal meter la pata cuando no se saben las cosas, lo que pasa es que cuando alguien lleva ingresado meses pues queman un poco este tipo de cosas. A mí no me molesta que alguien llame para pedirme algo, pero hija es que no te ha dado tiempo a salir de la habitación y ya están llamando de nuevo. O te piden analgesia y no te dejan ni tiempo para ver qué se le puede poner, ni prepararla.
      Llevamos unos 10-11 enfermos cada una, y es difícil estar a la voz de ya para todos, sobre todo cuando te demandan 3 ó 4 cosas a la vez, no nos queda otra que priorizar. Besotes.

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  6. qué maravilla, y los niños siempre dicen la verdad así que seguro qué está rico!

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  7. Tiene muy buena pinta, y la presentación también!! Seguro que era delicioso!!

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  8. Yo te entiendo, lo de el feeling con tus compañeros en el trabajo es primordial para medio ser feliz trabajando y más aún en tu trabajo.
    Lo de tus agobios o los agobios de todas vosotras también te entiendo pero es tan duro cuando tienes un enfermo y no sabes qué hacer que te desesperas, también comprendo que vosotras estáis acostumbradas y sabéis lo que hay pero la ignorancia de la situación y el dolor por parte de la familia te hace perder los papeles ...
    El bizcocho, FANTASTICO, no me extraña que tus hijos dramaticen jajajaj yo también me habría desmayado.
    Besazos.

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  9. Dónde encuentras el buttermilk???
    El trabajo es algo súper importante, y estar a gusto es fundamental....
    el molde me ha encantado! Besotes

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    1. Chiqui, en el Aldi siempre hay, además muy barato, 39 céntimos creo, y viene medio litro.

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  10. Me encantan tus recetas... y no te enfades eh!!! que te lo digo cariñosamente, porque sé que llevas razón, pero cuando alguien está en el hospital está pasando por un mal trago, y la verdad que hay quien se cree que es el final del mundo si no se toma la pastillita a su hora, yo desde luego hay cosas que no haría porque no me gusta molestar e intento ser educada, pero cuando he estado con mi madre en el hospital, me han dado ganas de salir corriendo, por no aguantarla a ella, y por no aguantar a más de una...
    pero vamos que tienes toda la razón...lo que pasa es que tú lo ves como trabajo, y sobre temas de salud, medicaciones etc. hay mucho desconocimiento y entonces se pone nervioso todo el mundo rápidamente y empiezan los líos, las carreras, las malas caras....
    En fin hija paciencia, que en esas circunstancias todo el mundo está más sensible, y por qué no decirlo muuu coñazooo.
    De todos modos lo que sí me molesta de verdad y no justificaría nunca es la mala esducación.
    Un saludo y que te sea leve...jejeje.

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    Respuestas
    1. Mari, como le he dicho a chismes y cacharros, no pasa nada si en un momento dado uno mete la pata, pero es que da mucho coraje explicar las cosas y aún así tropezar con el mismo asunto día tras día, cuando encima muchos de nuestros enfermos hasta pasan meses con nosotros.
      Y encima hay a quien le gusta meter cizaña, más de una vez le he explicado cosas a algún familiar, ha venido otro, le ha calentado la cabeza y cuando acudes, el segundo familiar te habla de malas maneras le vuelves a explicar la situación y el primero dice: "Es que como yo no entiendo señorita...", y hay que decir en plan borde que ya te has parado a explicarlo bien clarito y que no hace falta explicar lo mismo a cada familiar, es más, no tenemos tiempo.
      En general este tipo de problemas se deben a la mala educación, cuando se trata de un mal momento créeme, sabemos distinguirlo. Besotes.

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  11. Esos desmayos me suenas de algo ja ja!!! en casa hay muchos!!!!! tampoco me extraña la pinta es formidable, me voy a llevar un trozo y también la receta!!!besotes

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