Bueno, lo de monstruosas es un decir, éstas de la foto de arriba son las de mi hijo mayor y son más bien estilo rastafari. Y las de abajo, las del peque, son más estilo payaso. Pero bueno, se trataba de dejar volar su imaginación, y eso es lo que hicieron y aquí los resultados.
El caso, y eso no me lo podéis negar, es que han quedado bastante divertidas y Eva (la anfitriona de este mes), te tengo que agradecer que se lo pasaran tan tan bien, a parte de hincharse de chuches también...jejeje, si es que cuando estaba pendiente del uno me encontraba al otro con alguna en la boca, y claro, encantados.
Lo único que puedo decir es que mis niños cada día se lo pasan mejor en la cocina, eso es fácil con el mayor, al que es sencillo implicar en estos jaleos, pero al peque le costaba, ahora en cambio, cuando anuncio que toca receta mensual, también se pone la mar de contento. Y aunque al principio les da un poquito de reparo pringarse las manos, cada vez les cuesta menos meterse en faena y acaban riéndose a carcajadas con las manitas grasientas...jajaja...y yo disfruto lo que no os podéis imginar.
Bueno, os voy a contar un poco cómo fue el proceso:
Como siempre, empezamos con el lavado de manos exhaustivo.
Y ahora tocaba comenzar a desmigar los bizcochos.
Una vez desmigados, nosotros lo mezclamos con queso crema.
Y después hicimos bolas con la mezcla...
...que pasamos por coco rallado, fideos de chocolate y fideos de colores.
Por fin, sólo quedaba decorarlas, cómo, con imaginación...y muchas chuches
Como veis, nada complicado. De verdad os recomiendo a las que tengáis niños a que os embarquéis en esta aventura culinaria porque realmente merece la pena, sobre todo cuando han terminado su obra de arte y la miran con esos ojitos asombrados como diciendo: si lo he hecho yoooooooo...qué pasadaaaaaa!!!!!
Y ya también pienso que estas pequeñas experiencias vendrán muy bien en casa, para que sean más desenvueltos, para que aprendan a ser unos cocinillas que no necesiten que yo esté en casa para prepararse un buen plato de comida. Y es que el tiempo vuela y llegará el día en el que no pueda continuar con la reducción de jornada, y me gustaría que fueran unos chicos con recursos.
Y también me encanta pensar que algún día recordarán con cariño estos momentos que pasábamos juntos cocinando e inventando, que papá y mamá disfrutábamos haciendo actividades en familia y pasar mucho, mucho tiempo con ellos.
Que moneria! seguro que los nenes han estado de lo más participativos!!
ResponderEliminarhttp://cocinadeanita.blogspot.com/
Que bonitos y como disfrutan los niños. Besos
ResponderEliminarQue monas.. y que lindo el peque cocinando....
ResponderEliminarQue manitos mas lindas! Seguro que han disfrutado muchisimo con su mami y esta bolitas monstruosas! Han quedado genial!
ResponderEliminarBesos
Que chulada de monstruitos!!!! son geniales, menudos cocineros tienes en casa!!, y que bien se lo pasan, verdad? felicita a ambos, un beso
ResponderEliminarUilllllle, esos si que dan miedo, jajajja. Besito.
ResponderEliminarYolanda, que guay!!!
ResponderEliminarMe chiflan los monstruitos rastafari y los payasitos!!!! Mira que tienen imaginación! Y tienes toda la razón: todo son ventajas, además de que se lo pasan muy bien aprenden muchos valores y a apreciar el trabajo de la cocina y espabilarse ellos solitos.
Me alegro que os animárais este mes, mil gracias por participaaaaar!
Muchísima suerte en el sorteo - que hago esta noche - y un besote para los tres!!!!
Eva